Extraña luz roja sorprendió a pilotos en el Pacífico
Pilotos holandeses que viajaban de Hong Kong a Anchorage se quedaron perplejos a observar un fenómeno hasta ahora sin explicación: un intenso rayo de luz roja que se elevaba de forma vertical a la distancia.
El espectáculo fue seguido por luces de color roja y naranja unos 20 minutos después, según el piloto JPC van Heijst, que reportó que el avistamiento ocurrió cuando volaban al este de Rusia.
Entre más nos acercábamos, más intenso era el resplandor, iluminando las nubes y el cielo debajo de nosotros con un espantoso resplandor naranja, en una parte del mundo donde se supone que no hay otra cosa que agua”, afirmó.
El piloto cree que la única explicación posible al fenómeno es la erupción de un volcán submarino, y cuando esto se le vino a la mente, recordó que la ceniza volcánica puede parar los motores de un avión y causar que se estrelle. Para su fortuna, no se encontró con ceniza y el vuelo continuó de forma normal.
El espectáculo fue seguido por luces de color roja y naranja unos 20 minutos después, según el piloto JPC van Heijst, que reportó que el avistamiento ocurrió cuando volaban al este de Rusia.
Ayer por la noche sobre el Océano Pacífico, en algún lugar al sur de la península de Kamchatka, experimenté la cosa más espeluznante en mi carrera como piloto”, afirmó, según reportó el Daily Mail.
No había tormentas en su ruta o el radar meteorológico de la aeronave no mostró que las luces se originaban de una nube de tormenta, sólo nubes de otro tipo.
Hasta ahora, la luz roja es un misterio, y aunque otros pilotos han reportado luces que se pueden atribuir a barcos de pesca, en este caso fue algo totalmente distinto.
Entre más nos acercábamos, más intenso era el resplandor, iluminando las nubes y el cielo debajo de nosotros con un espantoso resplandor naranja, en una parte del mundo donde se supone que no hay otra cosa que agua”, afirmó.
El piloto cree que la única explicación posible al fenómeno es la erupción de un volcán submarino, y cuando esto se le vino a la mente, recordó que la ceniza volcánica puede parar los motores de un avión y causar que se estrelle. Para su fortuna, no se encontró con ceniza y el vuelo continuó de forma normal.
Antes del vuelo, recibió información de radio sobre sismos en Islandia, Chile y San Francisco, pero nada de actividad volcánica en dicha zona.
El piloto dijo que se sintió muy poco confortable con la situación, ya que ningún otro avión se encontraba en las cercanías para confirmar lo que ellos también estaban viendo, algo que fue reportado al control de tráfico aéreo.
“Una investigación sobre lo que pasó en esta remota región en el océano ya ha comenzado”, afirmó
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