El General Medina se niega a rendirse ante los insurrectos encabezados por Romulo Betancourt dado el sectarismo conocido de los partidos políticos de la época, y busca a Pérez Jiménez en los calabozos para entregarle su sable y su pistola, así como entregarle el poder de las fuerzas armadas.
"El general Medina hace salir del calabozo al Mayor Pérez Jiménez, al tenerlo en frente le entrega la pistola y le dice:"Mayor quiero que entiendan que deseo evitar un derramamiento de sangre. Si esto continua le causaríamos un inmenso mal a nuestra Patria, por lo tanto no vacilo en sacrificarme, para evitar una guerra Civil. Solo les pido que actúen con prudencia y... para evitar males al país, no entregaran el Gobierno a ningún partido político...Mayor estoy a sus ordenes" El General Medina en el libro de Carlos Alarico Gomez El poder andino p. 246
Pérez Jiménez salió de prisión y fue relegado de la junta y posteriormente asignado para tareas militares fuera del país.
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