4.4.- Inmediata expedición de decretos protegiendo las clases productoras de la tiranía
capitalista.
4.5.-
Revisión de los contratos y conseciones celebrados por la nación con el
capitalismo nacional y extranjero. Adopción de una política económica contraria
a la contratación de empréstitos. Nacionalización de las caídas de agua.
Control por el estado o el municipio de las industrias que por su carácter
constituyen monopolios de servicios públicos.
4.6.-
Otros.
El segundo gran momento histórico en términos de proyecto
nación y acción política en el ciclo vital de Rómulo Betancourt, lo constituye
la fundación de Acción Democrática como partido político, instrumento de
organización de la militancia y la población para el acceso al poder, portavoz
de un proyecto nación y una repuesta programática de gobierno e instrumento
también de acceso burocrático, de ejercicio y control de la administración
publica y de los cuerpos intermedios
entre el ciudadano y el Estado ( sindicatos, gremios profesionales y campesinos
etc). En el proceso político Venezolano, en el marco de la gran influencia del
binomio petróleo- Estado, el partido político (AD), no es una consecuencia de la decisión tomada
desde la sociedad civil. Al contrario, el partido apoyado en la dependencia
clientelar de la burocracia del Estado rentista petrolero, controlará e
impondrá lineamientos y conductas a la sociedad civil. Los sindicatos, colegios
profesionales, organizaciones campesinas etc. no serán cuerpos intermedios autónomos
entre el ciudadano y el Estado sino entes dependientes, controlados por el
partido político que administra la oportunidades de acceso a la burocracia del
Estado, favores y solución de necesidades a través del empleo burocrático y el
gasto publico de los presupuestos nacionales, estadales y locales generándose
una clara relación clientelar de dependencia del ciudadano en relación al
Estado poderoso y rico, receptor y administrador de la creciente renta
petrolera a partir de 1922.
Después de todo un periplo de militancia y fundación de
diversos instrumentos de organización política ( ARDI- ORVE-PDN), a través
de los cuales Rómulo Betancourt va evolucionando y depurando su visión
país de una posición marxista-leninista hasta una democrática reformadora y en
compañía de la elite que había congregado, en base a su liderazgo y acción
política a tiempo completo, fundan y lanzan a la opinión publica el 13 de
septiembre de 1941 el extraordinario instrumento de organización política y de
gobierno que es Acción Democrática.
De este hecho histórico, del 13 de septiembre de 1941, es
necesario analizar el discurso de Rómulo Betancourt en ese acto por su
contenido de visión y proyecto nación. En este discurso Rómulo Betancourt
expresa los siguientes elementos transcendentales:
1.- Expone que la fundación e inicio de la acción política
de Acción Democrática es una decisión producto de la experiencia adquirida y
madurez acumulada.
2.- Destaca que
Acción Democrática “nace armado de un programa que interpreta las necesidades
del pueblo”.
3.- Afirma que Acción Democrática es la obra de un equipo
de hombres conocidos en toda Venezuela por su bien ganada solvencia política y
moral al frente de los cuales esta Rómulo Gallegos. Tácticamente, por la
permanente acusación en su contra de comunista, Rómulo Betancourt no esta en
primera fila entre quienes firman el
acta de fundación de Acción Democrática. Pero todos saben y aceptan que el es
el gran visionario, líder y organizador político. El diseñador y ejecutor
principal de una estructura organizacional y estratégica, con un proyecto
nación y la presencia, compromiso y acción del mejor capital humano posible que
pueda integrarse a la acción partidista. Y cuando esa estructura política, Acción
Democrática, con sus virtudes y defectos, realizaciones, errores y omisiones ha
llegado a 67 años de vida habiendo ejercido hasta el presente por mas de 40
años, en diversas etapas y periodos, el poder a nivel nacional, estadal y
local, es obvio que estamos frente a un hecho histórico de visión, liderazgo y
gerencia política.
4.- En relación a su concepto de la realidad venezolana y
el papel que debe ejercer el Estado en un proyecto nación y obra de gobierno
expresa:
“Acción Democrática reconoce y proclama
que el mas angustioso problema nacional es el de la bancarrota de nuestra economía.
Somos una nación paradójicamente rica y empobrecida, una nación con un Estado
que maneja millones y una industria minera que cierra sus balances anuales con
cifras astronómicas. Y sin embargo, la mayoría de la población venezolana esta
pauperizada y vive bajo el signo de la inseguridad y de la angustia económicas.
¿A qué se debe esta situación de miseria generalizada, en un país sin deuda
gubernamental externa y con un Estado que ostenta el costoso privilegio de un
presupuesto anual señalado entre los más altos de América?.”
“La
razón es esta: nuestro país, económica y físicamente, esta girando alrededor de
una sola fuente de riqueza: el petróleo; y los gobiernos venezolanos no han
sabido, hasta ahora, imprimirle un ritmo agresivo, dinámico, a las otras
fuentes de producción”.
“Nuestro partido considera que, en este
propósito, el Estado venezolano tiene una tarea central por realizar. Debido a
las peculiaridades de nuestra estructura económica, el Estado venezolano cuenta
con disponibilidades de dinero y con recursos de todo orden que le señalan como
el primero, como el “baquiano”, en esta tentadora empresa de la reconstrucción
nacional”.
“Dispone el gobierno venezolano de un
presupuesto fantástico de 300 millones de bolívares, que anualmente consume una
tercera parte de la renta nacional. Y este presupuesto invertido en forma
racional y honrada, serviría para impulsar la economía pecuaria, agrícola e
industrial; y como acicate y estímulo para la actividad del capital privado.”
Estas premisas de proyecto nación y
acción de gobierno, fueron expresadas en 1941. 67 años después, en el 2008, la
situación de Venezuela desde el punto de vista estructural, basada en la dependencia
de la vida nacional de la monoproduccion y la renta petrolera, la insuficiencia
dinámica de la agricultura, agroindustria e industria, altos niveles de pobreza
y desempleo, sin negar los avances educativos, en infraestructura etc, nos
indica claramente la rigidez del modelo país basado en la monoproduccion y la renta petrolera como factor esencial de
dinámica económica y social y lo inconveniente e involutivo de la conducción
del Estado en base al centralismo político administrativo, el clientelismo
partidista y la hiperconcentracion y
centralización del poder político económico y financiero en la presidencia de
la republica y el poder central, quedando los ciudadanos, la empresa privada y
el resto de expresiones de la Sociedad Civil
Pero la plenitud de lo que fue Acción Democrática para
Rómulo Betancourt, lo expone con toda densidad en la siguiente conceptualización
que recoge Manuel Caballero en su libro sobre Rómulo Betancourt de 1979, al
referirse este a una compilación de
artículos de prensa publicados entre 1937 y 1939 en la sección de económica y
finanzas del diario “Ahora” de Caracas:
“La transformación de Venezuela en un sentido de progreso
que irradie hacia los estratos mas profundos de la nacionalidad, requiere del esfuerzo
unánime del pueblo comandando para la heroica empresa por una organización
partidista de vanguardia. Organización en la cual se conjuguen y complementen
la vocación revolucionaria y el rigorismo realista. Organización que agrupe y
sujete a una disciplina partidaria alrededor de una programa concreto e insuflándole
una mística creadora a todas las clases populares de la nación. Un partido
liberal o un partido comunista, no podrán cumplir en Venezuela ese rol
histórico sólo asumible por una organización de plataforma doctrinaria y de
estructura interna democráticas y antiimperialistas.”
Este concepto del partido político como gran factor dinámico
de la vida política y social quizás pudo ser útil y necesario en la Venezuela de 1940,
analfabeta y sin estructuras educativas
y sociales significativas, pero es insuficiente y dañino en la Venezuela actual por que
unido este concepto al peso del partido como factor esencial de la conformación
de la burocracia del Estado centralista y a la dependencia del ciudadano y la
sociedad civil del Estado receptor y administrador de la renta petrolera
y los impuestos, se relega al ciudadano y a la sociedad civil a ser manipulados, excluidos y
discriminados por la burocracia estatal y partidista y el inmenso poder y discrecionalidad
acumuladas. La persistencia en esta conceptualización de los partidos políticos,
fue lo que lo transformo a Acción Democrática y a COPEI y al cualquier otro que
se funde bajo estos criterios, en cascarones vacíos, porque no reflejan la
dinámica social y política de una ciudadanía y sociedad civil que están cansadas
de ser manipuladas y condicionadas por la burocracia estatal y partidista y quiere espacios de
autonomía y creatividad que constituyan un verdadero poder social que equilibre
y controle el gran poder del Estado sobre la vida nacional y permita la
participación creadora de los ciudadanos organizados en la construcción de la
plenitud democrática y el desarrollo integral de Venezuela.
Posterior a la fundación de Acción Democrática en 1941, el
próximo evento esencial en la vida de Rómulo Betancourt, es el proceso conocido
como el trienio (1945-1948). El 18 de
Octubre de 1945, Rómulo Betancourt, Delgado Chalbaud y Marcos Pérez Jiménez,
encabezando sendas elites civiles y militares derrocan al gobierno de Isaías
Medina Angarita e instalan una Junta Cívico Militar revolucionaria de gobierno
que actúa hasta 1947 cuando es electo, en elecciones universales y secretas,
Rómulo Gallegos como presidente de Venezuela con mas del 78% de los votos
validos, pero solo dura en el ejercicio de la presidencia hasta Noviembre de1948,
cuando es derrocado por el ala militar que dio el golpe de Estado de 1945. Sin
entrar en la polémica histórica de las causas y pertinencia de esta acción
revolucionaria Cívico Militar de 1945, que depuso un gobierno y una era e
impuso otra, analicemos los efectos y contenido esencial del proceso político y
social ocurrido entre 1945 y 1948 y la influencia de Rómulo Betancourt y Acción
Democrática al respecto.
A partir del 13 de septiembre de 1941, Rómulo
Betancourt y Acción Democrática conforman un binomio inseparable de acción
política y de gobierno.
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